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POSICIONAMIENTOS PROTECCIONISTAS EN REINO UNIDO 1.- Antecedentes normativos y posicionamientos institucionales proteccionistas |
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1.- Antecedentes normativos y posicionamientos institucionales proteccionistas
– En mayo del 2000, se presentó el Informe Stewart, encargado por el Gobierno del Reino Unido al Grupo Independiente de Expertos sobre Teléfonos móviles y salud (IEGMP) creado a tal efecto en 1999:
Apuesta por aplicar el principio de precaución: concluye que aunque no encontró efectos adversos “probados” en exposición a la radiación de RF por debajo de los límites legales, “ahora hay evidencia científica, sin embargo, que sugiere que puede haber efectos biológicos que ocurren en exposiciones por debajo de dichos límites. Esto no significa necesariamente que estos efectos provoquen enfermedades o lesiones, pero no es posible decir que la exposición a la radiación de radiofrecuencia, incluso a niveles inferiores a las directrices nacionales, no tenga efectos adversos potenciales para la salud. A la luz de estos hallazgos, el Grupo de Expertos recomienda un enfoque precautorio para el uso de tecnologías de telefonía móvil hasta que se disponga de información más detallada y científicamente sólida sobre cualquier efecto sobre la salud:- Presenta consejos específicos para el usuario adulto de teléfonos móviles: usarlos el menor tiempo posible, usar móviles con valores bajos de Tasa de Absorción Específica (SAR), usar juegos de manos libres y otros dispositivos que demuestren la reducción del SAR. Desalienta el uso de teléfonos móviles mientras se conduce.
Consejos u orientaciones específicos para niños: Se debe desalentar el uso generalizado de teléfonos móviles por parte de los niños para llamadas no esenciales.
“Como regla general, el Grupo de Expertos considera que los niños menores de 16 años no deben utilizar teléfonos móviles” (salvo para “llamadas esenciales”), ya que es probable una mayor vulnerabilidad que los adultos “a cualquier riesgo de salud no reconocido” (sistema nervioso en desarrollo; cabezas más pequeñas, cráneos más delgados y conductividad tisular más alta que les permite “absorber más energía de un teléfono” que los adultos; tendencia a “acumular un mayor riesgo” al usarlo durante un período más largo de sus vidas). “El desarrollo de la cabeza y el sistema nervioso generalmente se completa a los 16 años. Por ejemplo, la densidad de las sinapsis alcanza el nivel adulto en torno a la pubertad y el grosor del cráneo y el tamaño del cerebro alcanzan niveles de adultos de entre 14 y 15 años. Generalmente se reconoce que las personas con 16 años son lo suficientemente maduras para tomar decisiones informadas sobre otras actividades «adultas»”.
– En 2005, se presenta la actualización del Informe Stewart (informe “Teléfonos móviles y salud” 2004, realizado por la Junta del Consejo Nacional de Protección Radiológica –NRPB-). Su presidente Sir William Stewart estima que la evidencia de posibles daños se había fortalecido en los (casi) 5 años desde la publicación de Informe original del IEGMP, como recoge en la introducción del informe:
«Concluimos, por lo tanto, que no es posible actualmente decir que la exposición a la radiación de radiofrecuencia, incluso a niveles por debajo de las directrices nacionales, carezca totalmente de efectos adversos potenciales para la salud, y que las lagunas en el conocimiento son suficientes para justificar un enfoque preventivo”. «Recomendamos que se adopte un enfoque preventivo para el uso de las tecnologías de telefonía móvil hasta que se disponga de información mucho más detallada y científicamente sólida sobre los efectos en la salud».
– En 2007, el Grupo Asesor sobre Campos Electromagnéticos de muy baja frecuencia (SAGE), bajo la dirección del Departamento de Salud del Reino Unido, tras celebrar talleres, encuentros y grupos de trabajo entre las partes implicadas desde 2004, presenta al Gobierno su informe sobre “Enfoques de precaución”, que ante las líneas eléctricas reconoce como la mejor opción «restringir las casas y escuelas nuevas cerca de las líneas eléctricas existentes, y [la creación de] nuevas líneas eléctricas cercanas a casas y escuelas existentes» («corredores para nuevas construcciones»). Proponen unas distancias preventivas de seguridad de 60 metros (en líneas de 275 kV y 400 kV) y 30 metros (en líneas de 66 kV, 110 kV y 132 kV), para no superar un campo electromagnético de 0.4 μT. “La asociación entre los campos magnéticos y un mayor riesgo de leucemia infantil a menudo se expresa como que ocurre a largo plazo en campos promedio superiores a 0,4 μT. Para los campos magnéticos, por lo tanto, reconocemos que, dentro del concepto general de «tan bajo como sea razonablemente posible», existe un mayor imperativo para reducir los campos que están por encima de 0,4 μT…”. Un segundo informe del SAGE en 2010, formuló recomendaciones adicionales sobre las posibilidades de reducir la exposición a las redes de distribución de electricidad, incluidos los circuitos y subestaciones de baja tensión y tensión intermedia.
Este valor precaucionista de 0,4 μT, que atiende a la exposición a “largo plazo”, cuestiona la capacidad de protección del límite de 100 µT de la Recomendación del Consejo Europeo 1999/519/EC, que se basó en el criterio ICNIRP de 1998, que solo contemplaba los efectos a “corto plazo”, es decir, solo los efectos inmediatos en la salud tales como la estimulación de los músculos y nervios periféricos o las descargas y quemaduras causadas por el contacto con objetos conductores.
Tras recibir dichos informes el Gobierno del Reino Unido solo respaldó la implementación de las opciones de bajo costo y, aunque “el gobierno considera que el posible riesgo para la salud no es lo suficientemente grande como para justificar cambiarse de casa si se vive cerca de una línea eléctrica”, la Public Health England (agencia ejecutiva del Departamento de Salud) difunde en 2012 una guía de consejos para reducir la exposición en el hogar como los siguientes: “En el hogar, es posible ubicar las habitaciones y las áreas de estar más alejadas de la línea eléctrica. Estas medidas tendrán el mayor efecto en los hogares que están muy cerca (a pocos metros) de las grandes líneas eléctricas”. “En los dormitorios, los electrodomésticos como las radio despertadores se pueden ubicar a un metro más o menos de la cama”. “Para los niños, la eliminación de aparatos eléctricos innecesarios de sus dormitorios y salas de juego o su reubicación tan lejos como sea posible ayudará a reducir su exposición”.
– Desde 2002 hasta la actualidad, el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS) recomienda limitar el uso de teléfonos móviles por parte de los niños como opción precautoria.
- En 2005, el Departamento de Salud del Reino Unido edita el folleto “Teléfonos móviles y salud”:
“El grupo de expertos, por lo tanto, recomendó que, de acuerdo con un enfoque precautorio, el uso generalizado de teléfonos móviles por parte de los niños (menores de 16 años) debería desaconsejarse para las llamadas no esenciales.
A la luz de esta recomendación, los Jefes médicos del Reino Unido (UK CMOs) aconsejan encarecidamente que, cuando los niños y jóvenes utilicen teléfonos móviles, se los aliente a: usar los móviles solo para fines esenciales; mantener todas las llamadas cortas: hablar durante largos períodos prolonga la exposición y se debe desalentar. Los UK CMOs recomiendan que si los padres desean evitar que sus hijos estén sujetos a cualquier riesgo posible que pueda identificarse en el futuro, la forma de hacerlo es ejercer su decisión de no permitir que sus hijos usen teléfonos móviles”.
- En abril de 2007, el profesor Sir William Stewart, presidente de la Agencia de Protección de la Salud (HPA) y ex consejero de varios gobiernos británicos en temas de salud, demandó investigar los riesgos para la salud de las redes inalámbricas Wifi, antes de continuar con su implantación, ante la ausencia de estudios a largo plazo y por una evidencia cada vez mayor de la vulnerabilidad de los menores a los efectos potencialmente dañinos de la radiación de microondas

Datos de medición do programa Panorama (2007) da BBC. Ver abajo el vídeo - En mayo de 2007, la BBC, servicio público de radio y televisión, emite en su programa Panorama (ver vídeo subtitulado en castellano abajo completo y en línea la 2ª y 3ª parte, o en línea en inglés con posibilidad de traducción automática) en la que muestra su investigación que registra mediciones de Wifi escolar tres veces más potentes que las radiaciones de RF emitidas por una antena de telefonía móvil en la cercanía de un colegio, con entrevistas al presidente de la Agencia de Protección de la Salud –HPA- (Sir William Stewart) y otros científicos de reconocimiento internacional, que informan de la numerosa literatura científica que visibiliza los riesgos potenciales a la salud de las RF y apelan a aplicar el principio de precaución.
- En octubre de 2007, la Agencia de Protección de la Salud (HPA) reconoce la ausencia de estudios a largo plazo y anuncia una investigación sistemática.
En 2008, el Departamento de Educación del Reino Unido reconoce el derecho de decisión de cada centro de enseñanza sobre la forma de conexión a internet. En abril, de 2007 la Asociación Profesional de Enseñantes, envió una Carta al Ministro de Educación y Cualificaciones continuando hasta la actualidad una línea de denuncia (“los niños de la nación están siendo tratados como conejillos de india en un experimento a gran escala”) demandando “que no se deben instalar sistemas nuevos Wifi en las escuelas, que los sistemas existentes deben apagarse cuando no es necesario y que las escuelas deberían considerar si realmente necesitan usar Wifi…”. En 2008, en Irlanda do Norte se declara zona libre de wifi la Ballinderry Primary School, En mayo de 2009, el sindicato de maestros y profesores (ATL) de Irlanda del Norte solicita la aplicación del principio de precaución hasta no estudiar los efectos a largo plazo demostrando la inocuidad del Wifi escolar, llegando al debate públicamente la asociación del Wifi con la electrosensibilidad (julio. 2009). En octubre de 2008: Carta abierta del Dr. Grahame Blackwell, asesor en telecomunicaciones inalámbricas y miembro de la British Computer Society, alertando de los peligros para la salud que puede suponer el WiFi (29.10.2008)- En agosto de 2010, Trower Barrie, físico y ex asesor de inteligencia de la marina británica, expone públicamente que sus investigaciones para la Royal Navy muestran que el Wifi crea niveles peligrosos de radiación de microondas, especialmente para los niños.
- En noviembre de 2010, el informe del mercado de seguros británico LLOID’S (al igual que el informe de la compañia de seguros austriaca AUVA en 2009), lleva a la conclusión de que los riesgos para cubrir los daños a la salud provocados por las tecnologías de comunicación móvil son demasiado grandes. Por lo tanto, las reclamaciones en este campo están excluidas de cualquier cobertura de responsabilidad. El informe austriaco ya afirmaba que los campos electromagnéticos de las comunicaciones móviles tienen un efecto sobre: el sistema nervioso central, el sistema inmunológico y la síntesis de proteínas. Estos informes consderan que los límites de exposición a la radiación basados en los efectos térmicos no son garantia para evitar problemas de salud causados por estos campos electromagnéticos
- En 2010, la sección editada en el sitio web del NHS, llamada «Seguridad del teléfono móvil – Riesgos», en cuanto a los riesgos para los niños, afirma que “se cree que los niños corren un mayor riesgo de tener implicaciones para la salud debido al uso de teléfonos móviles. Esto se debe a que sus cráneos y células todavía están creciendo y tienden a absorber la radiación más fácilmente. Se recomienda que los niños usen teléfonos móviles solo si es absolutamente necesario”. La actualización de 2015 (pese a los cambios que no tienen en cuenta las evidencias que llevan a la OMS a clasificar las RF en 2011 como posible cancerígeno) conserva que “los niños pueden ser más vulnerables a cualquier riesgo de salud debido al uso de teléfonos móviles porque su cuerpo y sistema nervioso todavía están en desarrollo …
Se recomienda que los niños solo usen teléfonos móviles para fines esenciales y que todas las llamadas sean cortas como precaución”. - En 2011, el NHS edita el folleto «Teléfonos móviles y estaciones base: consejos de salud sobre el uso de teléfonos móviles«:
“… solo hemos usado teléfonos móviles ampliamente durante la última década y necesitamos más investigación para analizar la situación, especialmente a largo plazo.
El cuerpo y el sistema nervioso aún se están desarrollando en la adolescencia. Por lo tanto, como medida de precaución, los jefes médicos del Reino Unido aconsejan que los niños y jóvenes menores de 16 años deban ser alentados a utilizar teléfonos móviles solo para fines esenciales, y para mantener llamadas cortas. Si le preocupa, puede
tome medidas para reducir su exposición, como el uso de kits de manos libres o de mensajes de texto”.
En la actualización del 2016 de la sección del sitio web de la NHS, llamada «Seguridad del teléfono móvil – Preguntas frecuentes», afirma: ¿Los científicos saben todo sobre teléfonos móviles y salud? No, y la investigación continúa. Los teléfonos móviles solo se han utilizado ampliamente durante aproximadamente 20 a 30 años, por lo que no es posible estar tan seguros de la seguridad del uso a largo plazo. También se necesita más investigación sobre los efectos de los teléfonos móviles en los niños, ya que se sabe que son más sensibles que los adultos a muchos agentes ambientales, como la contaminación con plomo y la luz solar. El consejo del gobierno es ir sobre seguro y limitar el uso de teléfonos móviles por parte de los niños.
2.- Asociaciones y organizaciones profesionales del ámbito de la salud
INICIATIVA DE SALUD DE MÉDICOS ANTE LA RADIACIÓN Y EL MEDIO AMBIENTE / THE PHYSICIANS’ HEALTH INITIATIVE FOR RADIATION AND ENVIRONMENT (PHIRE), asociación independiente de profesionales de la medicina y especialistas asociados, nacida en el seno de la ONG “Radiation Research Trust” con el propósito de mejorar la educación sobre los efectos en la salud de la radiación no ionizante.
– Divulgan / participan de los llamamientos y alertas científicos que apelan a ajustar los límites de exposición al conocimiento actual en base a los efectos biológicos, a minimizar la exposición a las radiaciones de los CEM y al reconocimiento de la electrosensibilidad como enfermedad / síndrome ambiental. Participan activamente en campañas educativas y de divulgación de los riesgos de los dispositivos y redes inalámbricas de RF y de cómo minimizarlas, atendiendo a la mayor vulnerabilidad fetal e infantojuvenil, con especial atención al ámbito escolar y de mujeres embarazadas y progenitores. Asesoran para la regulación proteccionista de la exposición a la contaminación electromagnética.
– “Radiation Research Trust” fue una de las organizaciones firmantes del Manifiesto Europeo por una regulación de la exposición a los campos electromagnéticos (CEM) que proteja realmente la salud pública (2013). VER PROPUESTAS PRINCIPALES DEL MANIFIESTO EUROPEO:
- Aplicación del principio de precaución y del principio ALARA (tan bajo como sea razonablemente alcanzable) en la exposición a campos electromagnéticos (CEM).
- Minimizar los límites de Exposición CEM en base al conocimiento actualizado de sus efectos biológicos, con su monitorización global en tiempo real. Comenzando con 0’6 V/m (≈ 1 μW/cm2) en exteriores para radiofrecuencias y 1 mG en frecuencias extremadamente bajas.
- Campañas de información y etiquetaje de los dispositivos inalámbricos, sobre sus riesgos potenciales y de cómo minimizar la exposición a los CEM.
- Centros de enseñanza libres de exposición CEM. Conexión a internet por cable.
- Educación para la salud a los agentes implicados en el ámbito educativo sobre los riesgos de la radiación de los dispositivos inalámbricos ante la mayor vulnerabilidad infantojuvenil a la exposición CEM y a la presión publicitaria y grupal (conductas adictivas), exhortando a postergar el inicio de su uso en la población infantojuvenil.
- Reconocimiento de la Electrohipersensibilidad (EHS) como enfermedad ambiental y discapacidad funcional, y protección de las personas electro-hipersensibles en el ámbito sanitario, laboral, público y privado (vivienda).
- Primar y promocionar redes, tecnologías y técnicas biocompatibles y sostenibles.
- Normas sanitarias de convivencia de protección de la exposición pasiva.
– Las organizaciones británicas PHIRE y la BRITISH SOCIETY FOR ECOLOGICAL MEDICINE (BSEM) impulsan y suscriben la «Declaración de Consenso de 2020 de Expertos médicos y científicos internacionales y del Reino Unido en Efectos sobre la salud de la radiación por radiofrecuencia (RFR)». Ver la Declaración de Consenso y su Nota de prensa. Ver abajo extractos de la declaración:
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Declaración de Consenso de 2020 de Expertos y profesionales internacionales y del Reino Unido, del ámbito médico y científico, sobre los Efectos en la salud de la radiación por radiofrecuencia (RFR): La declaración refleja el consenso de los foros mundiales de expertos independientes más recientes sobre los efectos agudos y crónicos en la salud resultantes de la Radiofrecuencia (RFR). La declaración aclara las serias preocupaciones de la comunidad médica en torno al despliegue de 5G y el uso continuo de RFR en espacios públicos.
Alertan de una crisis de salud pública:1. Se ha demostrado que la Radiación de radiofrecuencias (RFR) daña los sistemas biológicos a intensidades por debajo de las pautas de ICNIRP. 2. La exposición pública a la RFR ya es dañina y aumentará con el despliegue de 5G. 3. La exposición es inevitable, contraviniendo la Ley de Derechos Humanos para aquellos que no dan su consentimiento. 4. Múltiples grupos asesores de salud gubernamentales internacionales están predispuestos por conflictos de intereses. Requieren las siguientes acciones urgentes:1. Moratoria inmediata sobre 5G, inalámbrico inteligente medida y cualquier otra nueva emisión de Radiofrecuencias (RF). 2. Establecimiento de límites de seguridad pública para proteger biológicamente contra efectos adversos para la salud. 3. Retirada de Wi-Fi, teléfonos inalámbricos y otras emisiones de RFR dentro o cerca de todas las escuelas. 4. Designación de áreas con baja Radiación Electro Magnética (REM) para proteger a quienes no se encuentran bien o no dan su consentimiento para la exposición. 5. Programas de educación para informar a los profesionales médicos sobre enfermedades / efectos relacionados con (REM). 6. Un enfoque de tolerancia cero a la influencia industrial en la política de salud pública y asegurar la de los órganos asesores oficialesa exclusión de aquellas personas que tengan conflictos de intereses. ¿Que aconsejan?
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– La presidenta de PHIRE, Erica Mallery-Blythe, fue una de las firmantes, entre otros llamamientos, de:
- La Carta abierta de médicos británicos sobre salud y seguridad del Wifi y los teléfonos móviles (marzo de 2014), en la que instan “a las agencias de salud y al público a actuar de inmediato para reducir la exposición a la radiación de radiofrecuencias. Esto es especialmente importante para los niños, que son fisiológicamente más vulnerables a esta exposición, para los cuales, los adultos tienen una responsabilidad de salvaguardia. La salud de los niños debe ponerse por encima de la conveniencia y beneficios comerciales. Los niños no deben usar teléfonos móviles, excepto en caso de emergencia, y la WiFi debe ser reemplazada con alternativas cableadas en las escuelas y otros entornos donde los niños pasan un tiempo considerable”.
- El Llamamiento de Reikiavik sobre la tecnología inalámbrica en las escuelas (febrero de 2017) que aboga por guarderías y centros de enseñanza primaria y secundaria libres de contaminación electromagnética eliminando los dispositivos móviles y la conexión de redes inalámbricas (WIFI) de las aulas favoreciendo la conexión a internet por cable.
- El EU 5G Appeal (2017), que insta a “tomar todas las medidas razonables para detener la expansión de los CEM de RF de la 5G hasta que científicos independientes puedan asegurar que la 5G y los niveles totales de radiación causados por los CEM de RF (la 5G junto con la 2G, 3G, 4G y el WiFi) no serán dañinos para la ciudadanía de la UE, especialmente para bebés, niñas y niños y mujeres embarazadas, así como para el medio ambiente.”. Así como aplicar los consejos de la Resolución 1815 de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa y otros ya citados en el Manifiesto Europeo.
BRITISH SOCIETY FOR ECOLOGICAL MEDICINE (BSEM), sociedad médica británica que promueve la práctica, educación e investigación en el campo de la Medicina Ecológica, disciplina que desde la medicina convencional considera cómo afecta a la salud las interacciones entre personas y medio ambiente, como en el caso de la contaminación electromagnética.
– En la Conferencia Científica sobre Radiación Electromagnética y Salud, que realizaron en marzo 2014, abogaron por minimizar la exposición al campo electromagnético y a favor de regular aplicando el principio de precaución en el establecimiento de límites y el fomento de tecnología biocompatible.
El Dr Damian Downing, en calidad de presidente de la BSEM, firmó la Carta abierta de médicos británicos sobre salud y seguridad del Wifi y los teléfonos móviles (marzo de 2014), en la que instan “a las agencias de salud y al público a actuar de inmediato para reducir la exposición a la radiación de radiofrecuencias. Esto es especialmente importante para los niños, que son fisiológicamente más vulnerables a esta exposición, para los cuales, los adultos tienen una responsabilidad de salvaguardia. La salud de los niños debe ponerse por encima de la conveniencia y beneficios comerciales. Los niños no deben usar teléfonos móviles, excepto en caso de emergencia, y la red Wifi debe ser reemplazada con alternativas cableadas en las escuelas y otros entornos donde los niños pasan un tiempo considerable”.
– La BSEM impulso junto a la PHIRE la Declaración de Consenso de 2020 de Expertos y profesionales internacionales y del Reino Unido, del ámbito médico y científico, sobre los Efectos en la salud de la radiación por radiofrecuencia (RFR).
BRITISH MEDICAL ASSOCIATION (BMA), organización sindical y profesional médica del Reino Unido, de más de 153.000 miembros.
La Junta de Ciencia y Educación de la Asociación Médica Británica (BMA) editó en mayo de 2001 el informe “Mobil phones and health, an interim report” donde apuesta como BMA aceptar “el enfoque de precaución” del Informe Stewart (2000), en el ámbito de las radiofrecuencias, “mientras la investigación no sea concluyente”, aconsejando, entre otros, reducir la exposición a las radiaciones de RF en el uso del móvil (limitar la duración de la llamada, limite el uso de teléfonos móviles por parte de los niños, no conduzca mientras usa un teléfono móvil, mostrar consideración a los demás), normativizar los sistemas de manos libres, proporcionar el SAR de los móviles, …
CIENTÍFICOS BRITÁNICOS DEL ÁMBITO DEL BIOELECTROMAGNETISMO, suscriben, entre otros llamamientos proteccionistas el llamamiento internacional a la ONU y a la OMS (2015) y el Llamamiento internacional para detener la implantación de la 5G en la tierra y en el espacio
♦ En mayo de 2015, se lanza el International EMF Scientist appeal, donde más de 250 científicos expertos en bioelectromagnetismo de 44 naciones, que han escrito más de 2.000 artículos revisados entre pares, apelan a las Naciones Unidas y a la OMS (ver llamamiento en castellano y otros idiomas) para hacer frente a la «crisis emergente de salud pública» relacionada con los teléfonos móviles y otros dispositivos inalámbricos. “Numerosas publicaciones científicas recientes han demostrado que los CEM afectan a los organismos vivos a niveles muy por debajo de la mayoría de las directrices internacionales y nacionales. Los efectos incluyen el aumento de riesgo de cáncer, el estrés celular, el aumento de radicales libres dañinos, daños genéticos, cambios estructurales y funcionales del sistema reproductor, déficits en el aprendizaje y la memoria, trastornos neurológicos y efectos negativos en el bienestar general de los seres humanos. El daño va más allá de la especie humana, ya que cada vez hay más evidencia de efectos nocivos tanto para las plantas como para los animales”. Indican que «las directrices de la ICNIRP no cubren la exposición a largo plazo y los efectos de baja intensidad”, siendo «insuficientes para proteger la salud pública”. Además de un “comité multidisciplinar independiente”, transparente, imparcial y sin sesgos de la industria para explorar alternativas que reduzcan la exposición humana, solicitan:
- La protección de niños y mujeres embarazadas; endurecer de las directrices y normas reguladoras; que los fabricantes desarrollen una tecnología más segura y a los SS. públicos responsables a asegurar una adecuada calidad y cableado eléctrico adecuado para minimizar la dañina corriente de tierra; garantizar al público una información adecuada sobre los posibles riesgos para la salud de los CEM y las estrategias de reducción de daños; educar a los profesionales de la salud acerca de los efectos biológicos de los CEM y proporcionarles la formación necesaria para el tratamiento de los pacientes con sensibilidad electromagnética; exhortar a los gobiernos a proporcionar formación y asignar fondos para una investigación sobre los CEM y la salud que sea independiente de la industria (instando a la industria a cooperar con los investigadores), que los medios de comunicación den a conocer las relaciones financieras de los expertos con la industria al citar sus opiniones sobre los CEM; y establecer zonas blancas libres de radiación.
Entre los firmantes británicos del International EMF Scientist appeal se encuentran:
Michael Bevington, (M.A., M.Ed., Chair of Trustees, ElectroSensitivity UK (ES-UK)), Mr. Roger Coghill (M.A., C. Biol, MI Biol, MA Environ Mgt; Member Institute of Biology; Member SAGE Committee on EMF Precautions), Mr. David Gee (Associate Fellow, Institute of Environment, Health and Societies, Brunel University), Dr. Andrew Goldsworthy, (BSc PhD, Lecturer in Biology (retired), Imperial College, London), Emeritus Professor Denis L. Henshaw (PhD., Human Radiation Effects, School of Chemistry, University of Bristol), Dr. Mae-Wan Ho, Ph.D. (Institute of Science in Society), Dr. Gerard Hyland (Ph.D., Institute of Biophysics, Neuss, Germany), Dr. Isaac Jamieson (Ph.D., Biosustainable Design), Emeritus Professor, Michael J. O’Carroll (PhD., former Pro Vice-Chancellor, University of Sunderland), Mr. Alasdair Phillips (Electrical Engineer), Dr. Syed Ghulam Sarwar Shah (M.Sc., Ph.D., Public Health Consultant, Honorary Research Fellow, Brunel University. London),Dr. Cyril W. Smith, (DIC, PhD, Retired 1990), Dr. Sarah Starkey (Ph.D., independent neuroscience and environmental health research), Robin Maytum (PhD, Senior Lecturer in Biological Science, University of Bedfordshire, Luton)
♦ El LLamamiento Internacional para detener la implantación del 5G en la tierra y en el espacio (diciembre de 2018), suscrito por científicos, médicos, organizaciones ambientales y ciudadanos de al menos 100 países donde llama a la ONU, a la OMS, a la UE, al Consejo de Europa y a los gobiernos de todas las naciones para a) detener el despliegue de la red 5G en la Tierra y en el espacio para proteger a la humanidad y al medio ambiente; b) cumplir la Convención de las NN.UU sobre los Derechos del Niño y la Resolución 1815 del Consejo de Europa, informando sobre los riesgos para la salud se las radiofrecuencias, y por qué y cómo evitar la comunicación inalámbrica y las estaciones base, particularmente en centros de cuidado diurno, escuelas, hospitales, hogares y lugares de trabajo; c) fomentar la comunicación cableada ante la inalámbrica, d) Prohibir/impedir la influencia de los lobbies de la industria de telecomunicaciones inalámbricas en las tomas de decisiones relacionadas con la expansión de la radiación de radiofrecuencias, e) Nombrar inmediatamente, grupos internacionales de científicos expertos en CEM y salud independientes de la industria y verdaderamente imparciales y sin conflictos de intereses, con el fin de establecer nuevas normas internacionales de seguridad para la radiación de RF, que protejan contra todos los efectos sobre la salud y el medio ambiente, atendiendo, entre otros a la exposición acumulativa y los efectos no térmicos; f) Nombrar inmediatamente, sin influencia de la industria, grupos internacionales de científicos con experiencia en CEM, salud, biología y física atmosférica, para crear un marco regulatorio integral seguro para la humanidad y el medio ambiente de los usos del espacio exterior.
En el Reino Unido este llamamiento ya fué apoyado, entre otros profesionales, por más de 630 personas del ámbito científico y más de 200 del ámbito de la medicina.
♦ Alasdair Philips, Graham Lamburn (de Powerwatch), con el profesor emérito Denis Henshaw y el profesor emérito Mike O’Carroll, publicaron en 2018 un artículo de acceso abierto en el Journal of Environmental and Public Health, que muestra que la incidencia de tumores cerebrales mortales en Inglaterra se duplicó entre 1995 y 2015 (la forma más mortal de tumor cerebral, el glioblastoma multiforme) en base a los datos de la Oficina de Estadísticas Nacionales del Reino Unido.
«Un posible factor es el uso generalizado de teléfonos móviles y la exposición a la radiación de radiofrecuencia (RFR). Esta sugerencia está respaldada por otros hallazgos epidemiológicos, como los del grupo de Lennart Hardell en Suecia, y la clasificación IARC de campos electromagnéticos de radiofrecuencia como un «posible carcinógeno humano» del Grupo 2B (IARC vol 102) basada principalmente en la fuerza de los datos epidemiológicos en el ser humano. Desde entonces, ha surgido un prestigioso gran estudio de animales del Programa Nacional de Toxicología de EE. UU, analizado Peer Review (ver el informe NTP en Microwave News). Esto confirma de manera vital los efectos carcinogénicos que ocurren después de la exposición de animales a RF (la falta de los cuales se dio como la razón por la que la última evaluación solo clasificó a la RFR como «grupo 2B» en lugar de al menos un probable carcinógeno del «grupo 2A»)… El mayor aumento en la incidencia en nuestro estudio se encontró en las regiones frontal y temporal del cerebro, que son las principales áreas del cerebro que están altamente expuestas a la RFR por el uso de teléfonos móviles…«. Alasdair Philips (2018)























