Comparecencia en la Asamblea de Madrid de Javier Zarzuela Aragón el 10.03.2024 en la Comisión parlamentaria de Estudio para abordar el uso de la tecnología por parte de la infancia y la adolescencia en la Comunidad de Madrid. Javier es un veterano docente y eco-activista, escritor del libro «STOP TIC INFANCIA. Por qué desdigitalizar la escuela» y coordinador en la Comunidad de Madrid de la campaña de Ecologistas en Acción «Escuela saludable» .
Transcripción de la comparecencia: exposición introductoria y respuestas:
Buenos días, los quiero en primer lugar agradecer la confianza que han tenido en invitarme a esta comisión. Espero poder ser útil en aquello que les voy a exponer.
Yo soy maestro de primaria, jubilado recientemente en el mes de junio pasado y he ejercido la enseñanza pública. Hoy en día dedico tiempo a la divulgación a este aspecto de digitalización e infancia. Deseo ofrecer mi visión en tres aspectos relativos a la digitalización, la infancia y la adolescencia:
Primero el aprendizaje relacionado con la digitalización escolar.
En segundo lugar, adolescentes salud y smartphones. Brevemente puntualizaré algunas cuestiones o focalizaré en alguna cuestión puntual ya que ha habido muchas intervenciones interesantes y suficientemente amplias sobre el tema.
Y por último la exposición de menores a campos electromagnéticos en el ámbito escolar que es un tema que no se trata suficientemente o simplemente no se trata quizá por desconocimiento.
Con respecto a la digitalización escolar decirles que yo he sido director de mi centro durante 8 años, he sido miembro de varios equipos directivos y he participado en los sucesivos planes digitales que a lo largo de más de 30 años han ido llegando a los centros: el Plan Mercurio, Plan Atenea, Aldea Digital, Escuela 2.0, Educa en digital, Escuelas Conectadas, etc. He participado en ellos, he probado, he utilizado los recursos y hasta el final de mi carrera docente, como profesor, lo he seguido haciendo. Esto me permite tener una visión profesional apoyándome en mi experiencia y también en las observaciones de los cientos de niños que han pasado por mis manos, por así decirlo, y también basándome en los progresivos y cada vez más numerosos estudios investigaciones de universidades entidades profesionales y juicios de especialistas.
No les voy a dar una visión particular, sino que les voy a reflejar la evidencia científica y también testimonios de expertos, más que una visión particular lo que le voy a dar es una noticia o noticias.
Empezando por los datos de los informes PISA, estos datos llevan alertándonos desde la edición de 2006 de que hay una correspondencia clara entre el uso de medios digitales y la disminución del rendimiento escolar. Los análisis de estos datos confirman de una forma apabullante que cuanto mayor es el uso de medios digitales en la escuela menor es el rendimiento y el aprendizaje en aspectos básicos estos análisis tienen en cuenta variables como la formación del profesorado, el nivel socioeconómico de alumnos y alumnas o la titularidad de los centros, estas variables no afectan a la conclusión general, repito, cuanto mayor es el uso de medios digitales en la escuela menor es el rendimiento y el aprendizaje en aspectos básicos. Quiero citarle solo algunos de los estudios que reflejan conclusiones en este sentido y aquí quiero hacer un paréntesis, yo les voy a facilitar a todos los grupos que están aquí presentes una documentación sobre estos análisis y también una serie de propuestas pormenorizadas sobre todo lo que voy a exponer.
El informe de la OCDE 2021, Lectores del siglo XXI, expresa o alerta de la diferencia sustancial de la comprensión lectora en formato de pantalla con respecto al formato impreso. El análisis del centro ISEAK, basado en los datos PISA de 2018 sobre 600.000 alumnos demuestra como disminuye el rendimiento en matemáticas, cuanto mayor es la implantación de programas digitales en los centros. Múltiples experiencias desarrolladas en universidades españolas como la de Navarra, la Universidad de Málaga, la de Valencia, reflejan el poder disruptivo de las pantallas sobre la concentración necesaria para aprender. La Universidad Técnica de Dinamarca en 2019 demuestra la reducción de la capacidad de atención. La Asociación Sueca de Pediatría en 2023 muestra los efectos de la exposición a pantallas en el lenguaje y los aprendizajes tempranos en infantil y primaria. Un estudio muy interesante de la ‘Universidad de Grenoble-Alpes’, una universidad francesa, demuestra el impacto negativo de las pantallas en la capacidad de razonamiento matemático y paradójicamente en el desarrollo del pensamiento computacional. También el Instituto sueco Karolinska 2023, que saben ustedes que es al que ha acudido el gobierno sueco para asesorarse sobre sus planes de digitalización. Este instituto sueco pone el foco en la merma de la memoria de trabajo cuando se usan dispositivos digitales sobre la menor comprensión lectora y de instrucciones por el uso de pantallas el menor desarrollo del lenguaje y la capacidad ejecutiva en la búsqueda de información o las consecuencias negativas sobre alumnos con síndrome TDH. Hay otro estudio, metaestudio, de 2023 de la Universidad de Valencia, basado en PISA, sobre 450.000 estudiantes, y muestra el efecto negativo de las pantallas sobre comprensión de la información, un elemento fundamental. Mucho más allá de de las fronteras europeas, la Soonchunhyang University de Corea del Sur compara la codificación e interpretación entre lectura digital y lectura en papel y llega a las mismas conclusiones. La mitad de estos estudios se refieren a PISA 2018, y no han contado con los datos de 2021, según los cuales, como ustedes saben, ha habido un desplome generalizado en aspectos de rendimiento y el aprendizaje. Quiero resaltar algo importante, que estos efectos negativos en el aprendizaje se producen a partir del buen uso o uso educativo en actividades que están detalladas en los planes digitales de centro o en las en las PGA, las programaciones generales anuales.
Es decir, no es el abuso o la sobreexposición o la falta crónica de formación del profesorado, lo que conduce a estos déficits hasta a estas consecuencias negativas en el aprendizaje, sino que es la propia naturaleza de estos medios. Es lo que se está constatando. A mayor exposición, lógicamente, a pantallas más evidentes son estos efectos, como es lógico.
¿Qué dicen los especialistas en pediatría neurolingüística o psiquiatría?
Aquí hemos tenido pues intervenciones muy interesantes en ese sentido y en las intervenciones en el pasado mes de marzo. La exposición a pantallas produce interferencias en el desarrollo de habilidades integradas para responder a problemas y retos reales. El desarrollo de la expresión oral, las destrezas expresivas y comunicativas también interfiere en la formación de la memoria las capacidades memorísticas, la interacción social el desarrollo de actividades y habilidades manuales, la pérdida del beneficio de la escritura a mano o el desarrollo motor. Por el contrario, no existe evidencia alguna de que la introducción de las tecnologías digitales en la escuela haya mejorado los aprendizajes, ninguna. Por otro lado, el uso de pantallas y de programas no conduce, en absoluto, a que nuestros menores tengan mayor competencia digital en el futuro. Un entorno de la técnica, que está evolucionando vertiginosamente, en lo que hoy vale, pasado mañana, pues, habrá quedado totalmente obsoleto. Insisto no conduce a una mayor competencia digital.
¿Cómo se justifica la escuela digitalizada? Pues, primeramente, se pone, y yo lo compruebo continuamente, se pone la tecnología en el centro no al niño. Es decir, continuamente estamos indultando la tecnología en los centros. Sin poner a niños y niñas niños en el centro. Su justificación parte de axiomas o eslogan, muy bien estudiados, por cierto, tales como que las tecnologías han llegado para quedarse, si el futuro es digital, la escuela no se puede quedar atrás. Y también hay una agobiante presión de las corporaciones y empresas del sector. Lógicamente ilegítimamente pero, la función de la escuela no debe ser atender a esa demanda del mercado.
Por otra parte la digitalización escolar ha supuesto y supone un sacrificio desproporcionado en medios económicos ustedes lo saben bien, en tiempo de aprendizaje del profesorado, en espacios en recursos personales de plantilla docente desplaza. Por otra parte, actividades posibles y necesarias para las cada para las que cada vez hay menos tiempo.
Y supone un impacto ambiental inasumible. Fíjense que solo EDUCA en digital, en desarrollo del periodo 21 al 25, ha supuesto la emisión a la atmósfera de 331,000 toneladas de dióxido de carbono computadas por la fabricación de los dispositivos, simplemente, al margen del impacto de los periféricos o las redes.
La conclusión, pues, discúlpenme si resultó poco simpático al reflejar esto, pero de las evidencias científicas sólidas lo que dicen los datos, no yo, se desprende que las descomunales inversiones realizadas y en curso por el gobierno central o las comunidades autónomas en España no solo no sirven para mejorar el aprendizaje de nuestros niños y jóvenes, sino que lo perjudican de forma sustancial y además tampoco sirven para garantizar la competencia digital futura de nuestros escolares actuales.
Sobre las medidas a tomar:
Ya les he comentado que les voy a proporcionar una serie de propuestas concretas que creo que pueden ser útiles a esta comisión, en principio, ya les adelanto descartar la obligatoriedad de uso de dispositivos digitales individuales tablets chromebooks como herramienta principal en centros educativos, públicos y concertados. La prohibición del uso de smartphones y tablets privadas en centros de infantil primaria, secundaria y bachillerato, y cuando se use en el bachillerato que sea por una supervisión. por una necesidad expresada por el profesorado. Una propuesta muy necesaria, evaluación de los efectos sobre el aprendizaje del uso de dispositivos digitales escolares, a través de un informe multisectorial que complemente o incluya todo lo que ya existe, y que eso permita revisar los planes de digitalización escolar de acuerdo con la evaluación y la evidencia científica, cómo aconseja la UNESCO.
Bueno, no voy a reflejar otras medidas, el tiempo que de que dispongo es limitado. Me gustaría hacer alusión al tema de los smartphones con respecto a la infancia y adolescencia. Las personas que han que han participado en estas comisiones, yo creo que ya han expuesto suficientes datos y juicios sobre sobre esto, pero, me gustaría hacer una pregunta:
¿Existe un uso adecuado? ¿qué pasa con el buen uso de las pantallas?
Es decir no me refiero al uso más disruptivo que produce más escándalo en la sociedad, como es el acceso al porno, el ciberbullying, el acoso sexual, el sexting, la incitación al odio, etc. ¿Qué pasa con los buenos usos de la tecnología de las pantallas?
Bueno, el mero buen uso de las pantallas tiene efectos no deseados, comprobados desde el minuto uno. Lógicamente a mayor exposición mayor incidencia de estos efectos y, lógicamente, dependiendo de los contenidos.
Participación en redes de mensajería, WhatsApp, Instagram, grabación y compartición de vídeos de forma compulsiva en las redes, juegos online y offline, seguimiento de influencers, no necesariamente disruptivos, visualización de vídeos cortos, el scrolling infinito, información a través de titulares de noticias seleccionadas para cada persona, seguimientos de páginas sobre dietas o modelado del cuerpo, posibilidad por tiempo ilimitado de acceso a entretenimiento visual o a música. ¿Qué dicen los especialistas en psicopedagogía pediatría y neurología del buen uso sin exposición a contenidos disruptivos? Pues nos dicen que interfiere la formación de las habilidades propias para enfrentarse a los retos, acostumbra a la recompensa inmediata, merma la capacidad de frustración, empobrece los registros de comunicación y la empatía, perjudica la capacidad de atención y de concentración, afectan a la autoestima, interfieren en la comunicación familiar, disminuye el rendimiento y la adquisición de aprendizajes básicos y se ceden datos con fines comerciales o modelado de opinión. Insisto esto lo provoca el buen uso de un agente altamente adictivo, son efectos comprobados negativos consustanciales al uso normal del Smartphone, que tienen mayor incidencia cuanto menor es la edad y cuanto mayor es el uso.
¿Qué se postula como respuesta?
Me uno a las personas que son críticas con la solución única de depositar la responsabilidad en los propios niños y adolescentes, no se tiene con las pantallas la misma actitud con adictógenos como el tabaco, el alcohol, las drogas de diseño, la pornografía, los juegos de azar, tampoco con actividades sensibles como conducir un coche, sacar una licencia de armas o consumir un medicamento, simplemente se prohíbe el acceso de estos elementos a los menores. Es decir, no se carga sobre ellos la responsabilidad ni de utilizar un vehículo cuando tienen 14 años, ni de utilizar un medicamento, ni de consumir alcohol.
- Respuestas a las personas miembros de la comisión parlamentaria:
Bien, como educador debo decir que estas soluciones, estas proclamas son ingenuas, porque ni niños ni adolescentes tienen la capacidad madurativa para gestionarse para vislumbrar en el océano adictivo de internet. A duras penas lo podemos hacer los adultos obviamente. Tampoco tiene en cuenta el carácter transgresor de la adolescencia. Imagínense ustedes que tienen una hija, un hijo que está en un jardín montando en triciclo y entonces llega un comercial con un 4 por4 y les dice que eso es el progreso, que va a hacer avanzar, va a conocer muchos más lugares, porque va a permitir más movilidad a esa niña que hasta entonces estaba utilizando su triciclo o su bicicleta en el jardín. Y nos la vende, y nos la mete en el jardín y nos dice, además, bueno, pues que tienen una serie de riesgos, que tiene que aprender seguridad vial, que tiene que aprender cuestiones con respecto a la legislación vigente, etc. Y al final resulta que tenemos a esa niña o niño conduciendo ese 4 por 4 por el jardín, cuando lo que necesitaba era conducir un triciclo, su triciclo, caerse, embarrarse. Porque esa niña cuando cumpla la edad como para poder conducir un vehículo, lo podrá hacer, si ha tenido las herramientas y se ha desarrollado adecuadamente con su triciclo o con sus juguetes.
No hay que tirar a la basura las herramientas que ya tenemos, pero puedo decir que gran parte o si no prácticamente todas las herramientas y todos los dispositivos, que han ido llegando a los colegios, han servido de bien poco para los objetivos de mejorar el aprendizaje. Yo he sido testigo como director de verdaderos dispendios económicos en dispositivos digitales que han acabado en el trastero. Los trasteros de los colegios están llenos de dispositivos digitales, de los cuales no se ha sacado todo el potencial que, para un adulto, pueden tener. Están llenos de polvo y en la mayoría de los casos se nos dice que, bueno, los tiremos o los reciclemos o los donemos. En estos días se está produciendo en toda España, no solo en la comunidad de Madrid, el aterrizaje de pantallas y se están retirando las anteriores en perfecto uso y se nos está diciendo o se nos ha dicho que hagamos con ellas lo que consideremos oportuno.
En cuanto a la atención, decía el representante del PSOE, si había una diferencia entre la exposición al teléfono móvil o a las tablets. Realmente, los estudios lo que nos dicen es que la exposición a dispositivos digitales en pantalla ya tiene estos efectos negativos, pueden ser tablets o teléfonos móviles. Es decir, lo que se conceptúa es la exposición a pantallas. No se está criminalizando la competencia digital, simplemente lo que se está poniendo en duda es que niños y niñas deban tener una competencia digital exponiéndolos a las pantallas y exponiéndoles al uso de elementos que no necesitan para los aprendizajes básicos. Piensen ustedes que en la en la niñez y la adolescencia desde los cero a los 15 años lo que estamos construyendo es un armazón, un armazón cognitivo que permitan a esas personas, cuando sean jóvenes o adultos, poder ser competentes, también competentes digitales.
Los menores burlan los controles qué hacemos bueno, pues, ahí sí que tenemos que hacer un trabajo y además en coordinación con la con la industria digital. Yo creo que hay una disposición de la industria a tratar estos temas. Se dice “hay algo de positivo”, habrá algo de positivo ¿verdad? En la en la digitalización los jóvenes socializan más. Tenemos que ver de qué forma están socializando, de una forma, pues, más superficial, se está de alguna manera rehuyendo el contacto directo, el que es más nutritivo y el que conforma las relaciones sociales de una forma mucho más sólida. Hasta hace 12 años, cuando empezaron a aparecer los smartphones. Bueno, antes de eso existía vida sobre la Tierra, como suelo decir. Cómo se relacionaban los jóvenes, cómo se relacionaban las personas, pues de una forma mucho más cercana, por teléfono, de una forma presencial. ¿Eso es peor era peor de lo que está ocurriendo ahora? Yo creo que es mejor, era mejor, porque le daba mucha más consistencia a lo que era la conformación de la relación social, la empatía, etc.
Decía la representante de Más Madrid, Borras, que lo principal es marcar los objetivos ¿Qué sociedad queremos? Efectivamente, ¿qué infancia queremos? Bueno, pues queremos una infancia que sea competente en aspectos emocionales, que sea competente en aspectos cognitivos, profesionales y que sea competente digitalmente. Para ello, ¿es necesario exponerles a todos los perjuicios que se están percibiendo, que están apareciendo por el uso de las pantallas? No es necesario, es más, un profesional digitalmente competente es aquel que ha tenido una infancia libre de pantallas porque le ha librado de todos estos inconvenientes. Es decir, no garantizamos que una persona que tenga esas características, ese armazón bien formado, ese armazón cognitivo, no lo podemos garantizar simplemente con exponer a los niños a las pantallas. En la sociedad utilizamos medicamentos. Y es una sociedad que hace uso con cuidado y de una forma intencional, en aquellos medicamentos, pues, que realmente no sirven o tienen efectos secundarios, pues, los retiramos del mercado o aconsejamos que no se usen. Parece que las pantallas tienen, pues, un tratamiento especial. Es decir, arrojamos a los niños a las pantallas y luego estamos buscando tiritas para prevenir, pues, todos los efectos que tienen. Sobre la pregunta ¿cómo potenciamos el efecto positivo? Realmente, son de tal calibre los efectos que estamos viendo en las pantallas que la mejor solución es preservar a los niños y niñas y adolescentes de las pantallas. No podemos decir otra cosa. Estas personas cuando sean jóvenes o adultas tendrán la capacidad, si hemos logrado preservar esos aprendizajes básicos y esa construcción de la personalidad, tendrán una capacidad suficiente como para ser competentes digitales. Además, ustedes saben, cómo yo, cómo aprenden los jóvenes en el ámbito digital. Aprenden rápidamente, mucho antes de lo que nos habíamos podido dar cuenta. Hemos sido así de jóvenes y no tiene por qué ser distinto ahora.
Me pregunta el señor Rafael Núñez si avalo yo los estudios y cuál es mi experiencia. Pues, mire yo era un entusiasta de la digitalización. Cuando apareció esa posibilidad, me entregué a estudiar cómo podía ser esta herramienta didáctica, a probar. Enseguida, me di cuenta de que tenía unos efectos en los niños sobre la atención, sobre la interpretación de la información, sobre la concentración. Y salí del entusiasmo inicial y de la fascinación, por el fuego artificial por los fuegos artificiales, me propuse centrarme en el niño, mirar al niño. Yo todo esto, todos estos estudios, y a lo mejor está mal decirlo, pero abalan mis observaciones. Las observaciones que he realizado durante años tanto en aspectos lógico-matemáticos, o sea, la exposición a pantalla hace que los niños y niñas y adolescentes razonen peor. La pantalla, lo que suscita es pasar a la siguiente página, leer la información en diagonal, no profundizar. Y lo que estamos educando la escuela es, precisamente, la capacidad de la persona para estudiar información, para analizar información. De poco me vale que los niños y niñas puedan estar expuestos a 800 millones de páginas web que hay, lo que me interesa es que tengan capacidad para entender un texto, para sacar la información, las ideas principales. Y para eso necesito solo un texto, nada más un texto y preferiblemente un texto impreso, porque también se ha demostrado como las pantallas interfieren o distorsionan la apropiación de la información, la interiorización de la información.
Campos electromagnéticos y principio de precaución:
Sobre esta cuestión de los campos electromagnéticos les voy a proponer una serie de medidas al respecto, que confío en que ustedes pues puedan tener en consideración, en un tema que es relativamente nuevo o desconocido pero muy importante para la salud de nuestros menores que están expuestos a radiaciones electromagnéticas encima de sus cabezas en cada en cada aula, pues hay un repetidor WiFi que según instituciones internacionales puedan tener un efecto negativo en su salud y que, en la medida en que hay indicios, se necesita acudir al principio de precaución de hecho, tanto en Francia como en Chipre y en la federación rusa, está prohibido[/limitado] el que en las en las aulas haya Wifi, el que niños y niñas estén expuestos a Wifi.
Bueno, dicho esto, la convivencia, la cuestión de las familias, la representante de Vox aludía a que era un bastión, una de las columnas fundamentales. Efectivamente yo creo que hay que visualizar las buenas prácticas de familia, buenas prácticas que sirvan de referente y de modelo para las demás familias. Ahora hay un movimiento y aquí se ha nombrado, ha salido varias veces, de familias por la adolescencia libre de móviles, es un movimiento minoritario pero muy potente. Lo que reclaman es un pacto, es un pacto familiar responsable que ayude a que sus hijos no se sientan como lo raros con respecto a sus amigos, sus compañeros cuando sus padres les digan que van a retrasar el uso del del Smartphone, por lo menos hasta los 16 años. No es necesario que todas las familias aboguen simultáneamente por esta medida, desde luego el hecho de que se vaya implementando poco a poco va a ser una realidad, si se apoya a estas a estas familias, a estos colectivos que van a que van a resultar eh esenciales en un cambio de cultura de sobre la protección de la infancia. También, con esto he respondido a al qué papel debiéramos jugar las familias al representante del PSOE.
Para los resultados de la comisión, yo les voy a les voy a les voy a facilitar tanto eh propuestas como referencias directas a estos estudios a los que he aludido antes. La representante de Más Madrid preguntaba a qué edad se considera que debieran aprender a usar las tecnologías. Yo creo que hay que abogar por prevención y por regulación. Ni una cosa ni otra es suficiente por sí mismas. Hay que educar a los niños y niñas sobre el uso de las redes, pero sin necesidad de exponerles a las pantallas, es decir, en las escuelas hablamos del tabaquismo, hablamos del alcoholismo, hablamos de otras lacras sociales, pero no por eso repartimos cigarros o alcohol a los niños. Se puede hablar y educar perfectamente en ese sentido. Regulación incluyendo la prohibición, no es algo raro, no es algo horrible hablar de prohibición, porque realmente estamos prohibiendo muchas cosas para proteger a los menores. Es precisamente su supremo interés lo que lo que tenemos que regular. ¿Qué estudios hablan de que hay una relación entre pantallas y efectos en el aprendizaje? Bueno, pues yo me referiría simplemente y creo que estaría muy bien que ustedes consultasen el estudio de Sapiens labs., es un estudio completísimo. Es una institución norteamericana y ahí demuestra con datos de miles de encuestas como la salud mental está condicionada por las pantallas y, no solo eso, todos los armazones necesarios para el aprendizaje. ¿En qué países están revirtiendo esta cuestión? tenemos el caso de Suecia a través, precisamente del informe que se encargó al Instituto Karolinska. El Instituto Karolinska emite un informe que les invito a que a que ustedes lo analicen. Está disponible, es muy accesible. Los países nórdicos realmente han revisado sus planes digitales porque se han dado cuenta de que efectivamente las pantallas tienen un efecto, pues que no se esperaba eh sobre los aprendizajes básicos.
Ver también:
Alegaciones al Anteproyecto de Ley para la protección de las personas menores del entorno digital